Desde mi punto de vista, en la historia de la música popular (o "ligera" que se decía antes) hay tres momentos en los que aparecen músicos que aportan algo nuevo; el primero es Elvis Presley, con el rock-and-roll. El segundo son Los Beatles, con su nuevo estilo. Y el tercero, es Michael Jackson aportando una nueva forma de hacer música y espectáculo. "Man in the mirror" es una de esas obras eclécticas en las que Michael Jackson recoge todo lo que le rodea y le da una nueva forma, con su toque especial. Menos mal que nos queda la música. Recordaremos siempre a este aspirante a Peter Pan por su obra, que es lo que perdura, y podremos tener siempre con nosotros ese sonido y esos pasos de baile inigualables. Esté donde esté, lo imaginaremos bailando en equilibrio sobre las puntas de los pies, girando sin parar, llenando el aire con su voz.
Desde mi punto de vista, en la historia de la música popular (o "ligera" que se decía antes) hay tres momentos en los que aparecen músicos que aportan algo nuevo; el primero es Elvis Presley, con el rock-and-roll. El segundo son Los Beatles, con su nuevo estilo. Y el tercero, es Michael Jackson aportando una nueva forma de hacer música y espectáculo. "Man in the mirror" es una de esas obras eclécticas en las que Michael Jackson recoge todo lo que le rodea y le da una nueva forma, con su toque especial. Menos mal que nos queda la música. Recordaremos siempre a este aspirante a Peter Pan por su obra, que es lo que perdura, y podremos tener siempre con nosotros ese sonido y esos pasos de baile inigualables.
ResponderEliminarEsté donde esté, lo imaginaremos bailando en equilibrio sobre las puntas de los pies, girando sin parar, llenando el aire con su voz.