Cuando el libro estaba en la parte más interesante, cuando apenas quedaba nada para terminar, Valerio descubrirá que el ratón de Laviana, en concreto el ratón de la biblioteca de Laviana, se ha comido las cuatro últimas páginas. Desesperado, le pondrá una trampa, lo perseguirá y finalmente llegará a un peculiar acuerdo con él.
Un libro tan delicioso como los bartolos (quien quiera saber lo que son, que lea el libro o que vaya a Pola de Laviana y pregunte por ellos).
Las ilustraciones de Elisa Arguilé son muy originales, de apariencia sencilla, casi esquemática, pero con numerosos detalles y pequeñas variaciones cargadas de significado.
Como curiosidad diré que este cuento comparte escenario (Pola de Laviana) y un personaje real (la maestra y apasionada de la literatura Rosa Serdio) con uno de los libros más originales de Alfredo: Las trenzas de Luna.
Sólo hace falta ver el autor para adivinar que el libro estará muy bien.
ResponderEliminarUn saludo, lijeros =)
Hola, Jorge:
ResponderEliminar¿Cómo es que pasé de los vaqueros a las dedicatorias y no vi el ratón? ¡Estaría royendo páginas!
Vuelvo a dar las gracias por tener la SUERTE de contar con un autor de cabecera como Alfredo G. Cerdá que ha sabido siempre poner la ilusión en las manos de los niños del pueblo donde trabajo y situarlo en el mapa de la LIJ.
Un lujo hacer que la magia vaya contigo al colegio por la calle de siempre y que tu pueblo sea ya de libro.
Besos. Rosa la Alta.
Hola Alfredo soy María del colegio Reina Sofia de Albacete,viniste el 6-6-2012, soy de 2º.B. Adios y muchísimas gracias
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