
Me ha parecido un libro muy muy muy entretenido. Tiene muchas virtudes: la calidad del lenguaje, el hecho de transportarte a un continente distinto en una época distinta y que puedas sentir la humedad, el calor, el miedo... y la originalidad de la historia, que me ha gustado tanto que a veces sentía que podía dar mucho más de sí. La brusquedad del final es el único pero que le puedo poner, aunque gana por goleada lo bueno.
Heinz Delam es un apasionado de África, donde ha vivido durante años. No cabe duda de que le ha marcado, y para bien. Lo que termina de inquietarme es que en su propia web haya puesto: "Inspirada en un una experiencia personal ocurrida en el recinto del antiguo cementerio colonial". No quiero ni imaginar que le haya pasado algo similar.
hola
ResponderEliminares muuuu malo!!!
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