La Moncloa me llama la atención por un error con Rajoy
Mariano Rajoy en la biblioteca de Fakeland
Es muy fuerte lo que me ha pasado y todavía no sé si hago bien en publicarlo. Las altas esferas del gobierno se han movido. Después de una serena reflexión, todavía no tengo claro lo que debo hacer. A lo mejor tengo que asumir mi error, pedir perdón y seguir hacia delante con la cabeza (del blog) bien alta. O a lo mejor no tengo que hacer nada. ¿Me podéis ayudar en una decisión tan complicada?
Todo empezó el 13 de diciembre, día en el que publiqué una entrada llamada Leer a los niños no da buena imagen en España. Quién sabe, quizá si lo hubiese publicado en 12 o el 14, no habría pasado nada, pero tuvo que ser el 13. En el pequeño artículo, ponía de relieve que siempre había imágenes fácilmente encontrables y reconocibles de los presidentes de EEUU leyendo o contando cuentos a niños. Les gustase o no, eran conscientes del valor de la animación a la lectura. Les gustase o no, eran fotografías o vídeos que les proporcionaban una buena imagen y, por añadidura, votos, que es el alimento de los políticos.
Sin embargo, había hecho la prueba con los presidentes de España y no había encontrado fotos de ninguno. Decía que quizá existiesen pero que, al contrario que en el país norteamericano, no se podían encontrar fácilmente ni estaban en el imaginario colectivo.
Pues bien, hace cinco días recibí un correo electrónico del jefe de comunicación de la Moncloa: Don Eloy Umbro Mista. En él se me instaba a rectificar ipso «pacto» la información que había dado y a entonar un «meo» culpa. Para mostrarme a las claras lo equivocado que estaba, me ha proporcionado diverso material audiovisual. Parece evidente que Mariano Rajoy no solo cuenta cuentos a los niños por obligación, para mejorar su imagen, sino que lo hace con pasión, vehemencia y muy buen ánimo.
Rajoy representando "Donde viven los monstruos" en el White House´s Ocent Garden
(Jardín Ocent de la Casa Blanca), al que fue invitado por Obama cuando conoció sus dotes
Rajoy recitando poesías de Gloria Fuertes ante una delegación de la embajada de Japón
Y a los incrédulos que piensan que estas imágenes son burdos montajes les diré que al principio yo también lo pensé. Sin embargo, junto con las imágenes me dieron acceso a una gran cantidad de grabaciones de sonido y vídeo en las que se oye y ve claramente al presidente contando historias. He de decir que es un narrador todoterreno, toca con gran solvencia cualquier género y estilo. Sin embargo, después de escuchar horas y horas de material, he podido detectar que con el que se encuentra más a gusto es con el género del absurdo, es un maestro del nonsense. Todavía resuena en mis oídos su reinterpretación de la obra de Maurice Sendak: «los monstruos son muy monstruos y mucho monstruos», o aquella aclamada y aplaudida fábula sobre la democracia y la tiranía que recojo a continuación:
Por tanto, ante la abrumadora avalancha de pruebas, no me queda otra que pedir perdón y rectificar mi artículo.
jajajaja
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